Para muchos adultos con horarios laborales estrictos, cumplir con las 7 a 9 horas de sueño recomendadas Academia Estadounidense de Medicina del Sueño puede ser un desafío. De acuerdo al doctor Daniel Pérez Chada, director de la Clínica del Sueño del Hospital Universitario Austral, “en los últimos 50 años, se ha perdido el 25% de las horas de sueño”. Una buena idea suele ser tratar de recuperar el tiempo de sueño en el fin de semana. Pero ¿es positiva o no esta “compensación”?
Según un nuevo estudio, liderado por Yanjun Song del Laboratorio Estatal Clave de Enfermedades Infecciosas del Hospital Fuwai en Pekín, China, presentado en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología 2024 (ESC, por sus siglas en inglés) indicó que las personas que recuperan el sueño durmiendo hasta tarde los fines de semana pueden ver reducido en un 20 por ciento su riesgo de cardiopatías.
Sin embargo, el doctor Joaquín Diez, especialista en psiquiatría y medicina del sueño, explicó a Infobae que la falta de sueño durante la semana va generando una “deuda”, y muchas personas intentan “pagarla” el fin de semana.
Pero, afirmó: “El sueño que se pierde no se recupera. A lo sumo, se amortigua un poco el impacto negativo de la fatiga acumulada. Dormir más los fines de semana puede ofrecer algunos beneficios temporales, como mejorar el estado de alerta o reducir la fatiga acumulada”.
El estudio analizó datos recopilados de 90.903 participantes del Biobanco del Reino Unido, cuyos hábitos de sueño fueron clasificados en cuatro grupos, según las horas de descanso recuperadas en días no laborales.
Según la investigación, cerca del 21.8 % de los participantes dormían menos de siete horas por noche, entrando en la categoría de “privación del sueño”. De acuerdo a Yanjun Song, “un sueño compensatorio suficiente está relacionado con un menor riesgo de cardiopatías”.
Una de las principales conclusiones del nuevo estudio es que después de un seguimiento promedio de casi 14 años, los participantes que compensaron con más sueño adicional durante el fin de semana (desde un poco más de una hora hasta aproximadamente 16 horas) tenían un 19% menos de probabilidades de desarrollar enfermedades cardíacas, en comparación con el grupo que durmió menos en el fin de semana.
En el subgrupo de pacientes con privación diaria de sueño, los que tenían el sueño más compensatorio presentaban un riesgo un 20 por ciento menor de desarrollar cardiopatías que los que tenían menos. El análisis no mostró diferencias entre hombres y mujeres.
Sin embargo, el doctor Diez señaló: “Según el estudio publicado por la Sociedad Cardiológica Europea, extender el sueño en el fin de semana podría incluso tener efectos positivos en la salud cardíaca. Pero, esta práctica no soluciona completamente la deuda de sueño acumulada durante la semana. Sería como decir que no fumar los fines de semana mejora la salud pulmonar respecto a los que fuman todos los días. Claro que es bueno bajar el riesgo, pero las consecuencias de un sueño insuficiente son el problema principal que tenemos que abordar de manera más enfática”.
Y completó: “Hay un estudio equivalente que también habla de la disminución del riesgo de depresión, pero con la misma dinámica. ‘Amortigua’ el riesgo que genera la falta de sueño. Pero es como decía al principio, que fumar 10 cigarrillos baja el riesgo de los que fuman 20”.
En coincidencia, la doctora Silvana Malnis (MN 126607), médica de staff Servicio Neumonología, Laboratorio de sueño del Hospital Alemán.