El Ministerio de Economía y Finanzas Públicas (MEFP), expresó su desacuerdo con la reciente evaluación de JP Morgan que ubica al país con un riesgo país de 1.942 puntos, el segundo más alto de la región después de Venezuela. Según el MEFP, este indicador no refleja integralmente el desempeño ni el potencial de la economía boliviana.
En su respuesta, el Ministerio atribuyó este resultado a factores internos como los bloqueos y conflictos políticos que generaron pérdidas estimadas en $us 2.200 millones, además de la paralización de créditos externos por $us 1.200 millones en la Asamblea Legislativa. Sin embargo, destacó que el país mantiene un cumplimiento puntual en el pago de su deuda externa.
Asimismo, subrayó los indicadores positivos de la economía, como un crecimiento del PIB del 3,1% en 2023 y del 2,6% al segundo trimestre de 2024. También resaltó el aumento de las Reservas Internacionales Netas, que pasaron de $us 1.709 millones en diciembre de 2023 a $us 1.905 millones en agosto de 2024.
El MEFP reiteró su confianza en la resiliencia del modelo económico boliviano, pese a las dificultades internas y los desafíos globales, y aseguró que las políticas implementadas buscan garantizar la estabilidad y el desarrollo sostenible del país.
