El expresidente Evo Morales comenzó la noche de este viernes su huelga de hambre en instalaciones de la Coordinadora de las 6 Federaciones del Trópico de Cochabamba y aseguró que se quedará en el país.
En imágenes compartidas en redes sociales del exmandatario, se observa que otros dirigentes también se sumaron a la medida de presión recostados sobre colchones, además del senador "evista" Leonardo Loza.
"Pueden detenerme, ojalá que no me maten, por favor. Estaba muchas veces en la cárcel, no tengo miedo, pero no me voy a ir de Bolivia, estoy con mi pueblo y con el pueblo vamos a resistir, vamos a enfrentar y vamos a derrotar un gobierno corrupto, un gobierno narco", dijo Morales.
Horas antes, el líder del MAS había anunciado la huelga de hambre hasta que el Gobierno pueda convocar a dos mesas técnicas para atender las demandas del "evismo" y con el objetivo de evitar hechos de sangre.
"No me voy a rendir, ni me voy a vender", añadió.
La medida de presión fue asumida poco después de la intervención de la Policía y Fuerzas Armadas a los bloqueos que existían en la carretera que une Cochabamba con el occidente desde hace 19 días.
La situación en el trópico de Cochabamba (Chapare) desafía cualquier noción de Estado de derecho y constitucionalidad en Bolivia. Los eventos recientes, en que cocaleros de las Seis Federaciones del Trópico han asumido el control, expulsando a la Policía y al Ejército, exhiben el creciente poder de una facción que ha convertido la región en su propio feudo.
La indignación general que causó la presentación de los resultados preliminares del Censo 2024 es el resultado de la desconfianza ciudadana en el gobierno, el rechazo a la manipulación y al uso político de la información pública, y la confirmación de la ineficiencia de las instituciones encargadas de la actualización, procesamiento y publicación de los datos que maneja el Estado Plurinacional.
La indignación general que causó la presentación de los resultados preliminares del Censo 2024 es el resultado de la desconfianza ciudadana en el gobierno, el rechazo a la manipulación y al uso político de la información pública, y la confirmación de la ineficiencia de las instituciones encargadas de la actualización, procesamiento y publicación de los datos que maneja el Estado Plurinacional.
Mientras el gobierno nos distrae con un referéndum mañudo y el acomodadizo ejecutivo de la COB propone medidas descabelladas para “proteger la economía”, los ciudadanos estamos cada día más pobres. Ante este horizonte difuso, lleno de problemas y preocupaciones y contaminado de humo de chaqueo, las alcaldías harían bien en girar el timón y, en corto plazo, darnos la posibilidad de reanimar nuestra economía. Mejor aún: generar economía de barrio por primera vez en la historia municipal. ¿Cómo?
Mientras el gobierno nos distrae con un referéndum mañudo y el acomodadizo ejecutivo de la COB propone medidas descabelladas para “proteger la economía”, los ciudadanos estamos cada día más pobres. Ante este horizonte difuso, lleno de problemas y preocupaciones y contaminado de humo de chaqueo, las alcaldías harían bien en girar el timón y, en corto plazo, darnos la posibilidad de reanimar nuestra economía. Mejor aún: generar economía de barrio por primera vez en la historia municipal. ¿Cómo?
CARLOS HUGO MOLINA
Frente a la crisis, afirmamos que Bolivia puede vivir del turismo, que la voluntad está sembrada y las pruebas están en todo el territorio nacional, como lo venimos acompañando en la Chiquitanía, Tiwanaku, Riberalta, Samaipata, San Ignacio de Moxos, San Ignacio de Velasco, Chuquisaca con la celebración del Bicentenario y lo ratificamos en Pando la semana pasada.
Frente a la crisis, afirmamos que Bolivia puede vivir del turismo, que la voluntad está sembrada y las pruebas están en todo el territorio nacional, como lo venimos acompañando en la Chiquitanía, Tiwanaku, Riberalta, Samaipata, San Ignacio de Moxos, San Ignacio de Velasco, Chuquisaca con la celebración del Bicentenario y lo ratificamos en Pando la semana pasada.
El presidente dice que el modelo aplicado por el MAS desde hace 18 años sigue dando buenos resultados. Es decir que los problemas que afectan a la economía son consecuencia de una estrategia de desarrollo “fantasma”, que opera desde una suerte de clandestinidad y se filtra en las estadísticas sin otro afán que el de crear la sensación — sólo la sensación— de que todo está mal.
El presidente dice que el modelo aplicado por el MAS desde hace 18 años sigue dando buenos resultados. Es decir que los problemas que afectan a la economía son consecuencia de una estrategia de desarrollo “fantasma”, que opera desde una suerte de clandestinidad y se filtra en las estadísticas sin otro afán que el de crear la sensación — sólo la sensación— de que todo está mal.