Las sequías, granizo, heladas y lluvias serán cada vez más extremas y recurrentes, por el impacto del cambio climático; y las consecuencias más serias son la inseguridad alimentaria e hídrica y la migración de los productores a las urbes, coincidieron expertos en medioambiente.
Las últimas semanas, por ejemplo, se registraron un incendio en el corazón del Madidi, inundaciones en Tarija y una riada en La Asunta, en La Paz. El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) emitió una alerta naranja por lluvias y tormentas eléctricas en los departamentos de La Paz, Beni, Santa Cruz y Pando. Además, una alerta hidrológica por desbordes en Chuquisaca y en el norte paceño.
Inseguridad alimentaria
El investigador de la Fundación Agrecol Andes, Tito Villarroel, explicó que, si bien la problemática del cambio climático es mundial y se siente principalmente en las zonas rurales, “hay sequías más prolongadas y frecuentes, las heladas son mas intensas y hay granizo donde nunca hubo. Incluso se han presentado todos los fenómenos en un mes poniendo a la población en alta vulnerabilidad”, explicó.
Villarroel aseguró que la situación se agrava con la deforestación por los incendios forestales, principalmente. “La relación es intrínseca entre el bosque de la Amazonía y la lluvia”, añadió.
Además, explicó que los bosques generan humedad que impacta positivamente en la zona andina y en los valles del país. “Si no hay bosque, no hay lluvia y viene la sequía”, sostuvo.
Los efectos más serios de la sequía son la inseguridad alimentaria y la hídrica, además, de la migración de los productores a las ciudades, añadió Villarroel. “Los productores siembran con la esperanza que llueva y si no la semilla se quema y se pierde la cosecha”.
Una de las consecuencias de la pérdida de la producción es la inseguridad alimentaria.
Para el investigador de la Fundación Tierra, Efraín Tinta, el incremento de los gases de efecto invernadero y los incendios forestales elevaron la temperatura, lo que ocasionó efectos en el ciclo de agua. “Se perdieron glaciares y, por tanto, masa de hielo; disminuyen los niveles de los lagos y se presentan periodos largos de sequía”, sostuvo.
Tinta explicó que el periodo de lluvia disminuyó, pero llueve mucho y eso ocasiona desastres.
Coincidió con Villarroel en la necesidad de combatir los incendios forestales para mitigar los impactos del cambio climático.
Alerta de desborde de los ríos
Hasta el 15 de noviembre, se prevén desbordes en los ríos Cotacajes, Boopi, Tamampaya, Solacama, Unduavi, Taquesi, Miguillas, Zongo, Coroico, Yara, Alto Beni, Tipuani, Mapiri, Enatahua, Tequeje y Tuichi, en La Paz. Se pide precaución a la población de Cimarrón, La Asunta, Chulumani, Zongo, Cahua, Apana, Fariñas, Coroico, Caranavi, Santa Rita de Buenos Aires, Palos Blancos, Alto Beni, Tipuani, Chima, Bartolo, Guanay, Angosto Quercano, Mapiri, Ixiamas y Pelechuco.
En Chuquisaca, hay alerta en los ríos Pescado, Zudáñez, Azero, Pilcomayo y Parapetí.