Una Sala Constitucional de la ciudad de Cochabamba notificó el pasado 22 de noviembre, mediante un cedulón en su domicilio, al expresidente Evo Morales Ayma, sobre una Acción Popular interpuesta por la presidenta del Concejo Municipal de La Paz, Lourdes Chambilla para determinar la prohibición de futuros bloqueos.
La audiencia ha sido programada para hoy a las 8:45 en la Sala Constitucional Cuarta del Tribunal Departamental de Justicia de la ciudad de La Paz. El recurso de garantía constitucional fue presentado el pasado 6 de noviembre, cuando se cumplían 23 días de bloqueos promovidos por Evo Morales, con epicentro en el Trópico de Cochabamba.
Chambilla busca que se prohíba a Morales de realizar nuevos bloqueos, bajo la advertencia de ser acusado por desobediencia a resoluciones de amparo constitucional.
En la demanda también solicitó que las autoridades competentes adopten medidas proporcionales para restablecer la circulación, priorizando el acceso a bienes esenciales y la seguridad ciudadana.
Además, se ha pedido que la prohibición alcance también a los dirigentes sociales involucrados en los bloqueos de carreteras.V
¿Usted sabía que el 40 por ciento de la superficie total de Bolivia, de una extensión de 1.089.581 km2, es montañosa y que más de la mitad de población vive en estos lugares? De ahí que esa sea una de las razones para conservar a estos gigantes de piedra.
GONZALO MENDIETA ROMERO
Ingenuamente, iba a sugerirle a Evo que, al llegar a La Paz, reserve unos minutos para comprarse el Manual de vida de Epícteto. Está disponible en una librería del centro, en edición de bolsillo. Puede leerse de un tirón, echado en la vagoneta blanca desde la que Evo, de rato en rato, acompaña la marcha, según reportes creíbles de sus detractores.
Ingenuamente, iba a sugerirle a Evo que, al llegar a La Paz, reserve unos minutos para comprarse el Manual de vida de Epícteto. Está disponible en una librería del centro, en edición de bolsillo. Puede leerse de un tirón, echado en la vagoneta blanca desde la que Evo, de rato en rato, acompaña la marcha, según reportes creíbles de sus detractores.
MARCELO GONZALES YAKSIC
En los últimos días, la ciudad de Cochabamba ha sido víctima de una crisis ambiental y de salud pública derivada del bloqueo del botadero de basura de K’ara K’ara. Lo que en un principio parecía una protesta vecinal justificada por años de padecimiento debido a la cercanía de este vertedero, los últimos años ha tomado un giro que muchos consideran una manipulación política y un ejemplo claro de extorsión organizada por terroristas.
En los últimos días, la ciudad de Cochabamba ha sido víctima de una crisis ambiental y de salud pública derivada del bloqueo del botadero de basura de K’ara K’ara. Lo que en un principio parecía una protesta vecinal justificada por años de padecimiento debido a la cercanía de este vertedero, los últimos años ha tomado un giro que muchos consideran una manipulación política y un ejemplo claro de extorsión organizada por terroristas.
HUMBERTO VACAFLOR GANAM
El cocalero Morales había dicho en agosto que, si mañana se hiciera una elección, él obtendría 60% de los votos, pero ocurre que una encuesta dice que sería justito al revés, que el voto negativo llegaría a 65%.
La semana pasada, la encuestadora Diagnosis medió las preferencias de los electores y encontró que sólo 12% de los encuestados votarían por el cocalero, que 45% no votarían jamás por él y 10% no tendrían ninguna intención de hacerlo.
El cocalero Morales había dicho en agosto que, si mañana se hiciera una elección, él obtendría 60% de los votos, pero ocurre que una encuesta dice que sería justito al revés, que el voto negativo llegaría a 65%.
La semana pasada, la encuestadora Diagnosis medió las preferencias de los electores y encontró que sólo 12% de los encuestados votarían por el cocalero, que 45% no votarían jamás por él y 10% no tendrían ninguna intención de hacerlo.
Era un momento inefable, en los 1970 en casi todo el mundo, la sincronicidad de un movimiento global para salvar el medio ambiente en peligro y, al mismo momento, otro por los derechos de las mujeres.
Era un momento inefable, en los 1970 en casi todo el mundo, la sincronicidad de un movimiento global para salvar el medio ambiente en peligro y, al mismo momento, otro por los derechos de las mujeres.