La estatal YPFB prevé cobrar aproximadamente 2 dólares por millón de BTU (Unidad Térmica Británica) por el transporte de gas argentino hacia Brasil, en un nuevo negocio que espera poner en marcha el próximo mes. Inicialmente, se proyecta transportar hasta 4 millones de metros cúbicos diarios (m3d), con la expectativa de alcanzar los 10 millones de m3d para 2025, según informaron fuentes oficiales.
Julio César Soliz, director de Contratos de YPFB, explicó en un evento virtual organizado por el Mercado Electrónico de Gas (Megsa) de Argentina, que los precios variarán en función de la duración de los contratos suscritos con vendedores argentinos o compradores brasileños.
“El precio está en el orden de los 2 dólares por millón de BTU, pero variará según el tipo de contrato, que puede ser diario, mensual, trimestral o anual. En función de eso, los precios fluctuarán, pero el promedio es de 2 dólares”, señaló Soliz.
Decreto Supremo
Tras la aprobación del Decreto Supremo 5602, Bolivia asume el rol de “transportador internacional de gas en tránsito”. Los contratos se firmarán tanto con proveedores argentinos como con compradores brasileños, y YPFB espera cerrar el primer acuerdo en noviembre.
Hasta septiembre, Bolivia exportaba gas a Argentina desde 1972, lo que generó ingresos de aproximadamente 25 mil millones de dólares. El precio de venta superaba los 8 dólares por millón de BTU, aunque en 2022 se alcanzó un récord de más de 14 dólares.
Sin embargo, desde octubre, Bolivia dejó de vender gas a Argentina, que ahora obtiene el suministro de Chile mientras se prepara para autoabastecerse con el megacampo de Vaca Muerta. Ante esta situación, YPFB destinará los volúmenes que Argentina dejó de comprar hacia Brasil, y además espera aprovechar la capacidad ociosa de sus ductos para transportar gas argentino desde Yacuiba hacia Brasil, a través de Mutún o San Matías.
El exministro de Hidrocarburos Álvaro Ríos destacó que YPFB “hizo lo que debía hacer”, pero enfatizó la importancia de concretar los contratos lo antes posible. Sin embargo, lamentó el cambio de Bolivia de ser un país exportador de gas a uno de tránsito. “Es triste que hayamos llegado a esta situación, pero es peor tener los ductos vacíos. Todo esto es consecuencia de una fallida política exploratoria por motivos político-ideológicos del pasado”, expresó.
Tranquilidad
Por su parte, Soliz aseguró que los clientes pueden estar tranquilos, ya que el gas transportado no será utilizado para el consumo interno en Bolivia. No obstante, dejó abierta la posibilidad de que en el futuro se considere la compra de gas argentino tanto para el autoabastecimiento como para su comercialización a terceros.
En este contexto, YPFB espera que tanto vendedores argentinos como compradores brasileños muestren interés en los acuerdos de tránsito de gas.