La selección de Ecuador procurará frenar mañana (21:00 HB) a Brasil, con una propuesta de juego dinámica, agresiva y de protagonismo, en el encuentro que le enfrentará a la pentacampeona del mundo en la séptima fecha de las eliminatorias sudamericanas de clasificación para el Mundial de 2026.
El combinado ecuatoriano disputará este partido con apenas cuatro entrenamientos al mando del nuevo seleccionador, el argentino Sebastián Beccacece, que asumió las riendas de la Tri tras la salida del español Félix Sánchez.
Beccacece intentará sacar partido a todo lo aprendido por los jóvenes futbolistas de Ecuador con los dos anteriores seleccionadores, desde el dinamismo que le dio al equipo el argentino Gustavo Alfaro a la solidez defensiva que caracterizó a la etapa de Sánchez.
Para este partido, Beccacece lamentará la ausencia de Ángelo Preciado.
Con el avance de los trabajos de construcción de su Línea Amarilla, el Tren Metropolitana de Cochabamba está en vías de consolidarse como una opción conveniente para el transporte de pasajeros.
Tuvieron que vencerse muchas peripecias, todas resultantes de la oposición ciudadana, antes de que se defina el trazo de esa línea y se inicie su implementación, aunque con un alcance distinto del que tenía al principio pues no llegará hasta Sacaba.
En una conferencia de prensa en junio del presente año, el presidente Arce declaro: “Nuestro modelo económico es un modelo redistribuidor”. Está claro que para Arce esa es la finalidad de su modelo económico, su razón de ser. Habría que hacerle recuerdo al señor presidente que no se puede redistribuir el excedente si éste no existe, y éste no puede existir si no se lo produce primero; sin producción no hay redistribución.
En una conferencia de prensa en junio del presente año, el presidente Arce declaro: “Nuestro modelo económico es un modelo redistribuidor”. Está claro que para Arce esa es la finalidad de su modelo económico, su razón de ser. Habría que hacerle recuerdo al señor presidente que no se puede redistribuir el excedente si éste no existe, y éste no puede existir si no se lo produce primero; sin producción no hay redistribución.
El año 1949 George Orwell escribió la famosa novela titulada “1984”, infundido en los tormentos y persecución política que sufrió durante los regímenes de Hitler y Stalin. Es una obra distópica (antiutópica) que traza la forma “infeliz” en la que se viviría a partir del año 1984, mostrando la apabullante estructura de poder y los horrores que son impuestos a los ciudadanos por una dictadura que utiliza los métodos más abominables que puedan ser concebidos.
El año 1949 George Orwell escribió la famosa novela titulada “1984”, infundido en los tormentos y persecución política que sufrió durante los regímenes de Hitler y Stalin. Es una obra distópica (antiutópica) que traza la forma “infeliz” en la que se viviría a partir del año 1984, mostrando la apabullante estructura de poder y los horrores que son impuestos a los ciudadanos por una dictadura que utiliza los métodos más abominables que puedan ser concebidos.
JAVIER VISCARRA VALDIVIA
Hace unos días, Héctor Arce Zaconeta, representante de Bolivia ante la Organización de Estados Americanos (OEA), intentó justificar la ausencia de nuestro país en una reunión clave del Consejo Permanente. Durante ese encuentro, se aprobó una resolución que instaba al gobierno venezolano a publicar las actas de las elecciones del pasado 28 de julio.
Hace unos días, Héctor Arce Zaconeta, representante de Bolivia ante la Organización de Estados Americanos (OEA), intentó justificar la ausencia de nuestro país en una reunión clave del Consejo Permanente. Durante ese encuentro, se aprobó una resolución que instaba al gobierno venezolano a publicar las actas de las elecciones del pasado 28 de julio.
En Bolivia comenzó una tragicomedia en 2006, cuando el MAS llegó al poder, bajo un guion provocador de cuantos estados emocionales existen: asombro, ilusión, confusión, decepción, frustración y, como en Las Vegas, esa gran comedia negra, asco y miedo también. En un ritual creativo y colorido de origen desconocido, con momentos secretos de los cuales se habla bajo, el jefazo fue coronado en Tiahuanaco ataviado con brilloso tipoy y sombrero de tres picos reclamando sus cascabeles.
En Bolivia comenzó una tragicomedia en 2006, cuando el MAS llegó al poder, bajo un guion provocador de cuantos estados emocionales existen: asombro, ilusión, confusión, decepción, frustración y, como en Las Vegas, esa gran comedia negra, asco y miedo también. En un ritual creativo y colorido de origen desconocido, con momentos secretos de los cuales se habla bajo, el jefazo fue coronado en Tiahuanaco ataviado con brilloso tipoy y sombrero de tres picos reclamando sus cascabeles.