El Gobierno de Javier Milei resolvió ayer que el cine producido en Argentina para plataformas digitales sólo recibirá subsidios estatales si logra tener al menos 10 mil espectadores.
Mediante un decreto de la Presidencia argentina, publicado ayer en el Boletín Oficial, el Ejecutivo prohibió que el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) otorgue subsidios por adelantado y sin contraprestación a productores de películas no exhibidas en salas, sino a través de plataformas digitales de “streaming”.
A partir de ahora, en vez de ayudas anticipadas, el Incaa dará a los productores créditos y, si una vez estrenada, la película logra un mínimo de espectadores, obtendrán un subsidio estatal con el que podrán cancelar parte del préstamo.
En el caso de películas emitidas por “streaming”, deberán acreditar al menos 10 mil reproducciones en las plataformas para acceder a un subsidio. En lo que va de año se estrenaron 40 películas financiadas por el Incaa que tuvieron menos de 1.000 espectadores.
Los perjuicios ocasionados en estas más de tres semanas de bloqueos de carreteras y actos de violencia ejecutados por organizaciones afines al ala evista del Movimiento al Socialismo (MAS) no solo agravan la situación económica que atravesamos.
Tenemos motivos fundados de preocupación y pesimismo. Dedicamos mucho tiempo a pensar, hablar y escribir sobre ellos, buscando la luz al final del túnel y, ojalá, las rutas para alcanzarla. Pero no somos ilusos para creer que todo es cuestión de voluntades aisladas, de creatividad explosiva en el mundo real o virtual. Por eso mismo se comprende la sensación de vacío al caer al abismo que nos invade y aprisiona.
Tenemos motivos fundados de preocupación y pesimismo. Dedicamos mucho tiempo a pensar, hablar y escribir sobre ellos, buscando la luz al final del túnel y, ojalá, las rutas para alcanzarla. Pero no somos ilusos para creer que todo es cuestión de voluntades aisladas, de creatividad explosiva en el mundo real o virtual. Por eso mismo se comprende la sensación de vacío al caer al abismo que nos invade y aprisiona.
ANDRÉS GÓMEZ VELA
Conozco jueces justos y juezas justas. También conozco ineptos y corruptos. Los primeros deben su cargo a sus méritos: desempeño en el mercado laboral, logros profesionales, espíritu competitivo, honestidad, gigante sombra social y carácter para alcanzar metas. Los segundos deben su cargo a “padrinos” políticos; en consecuencia, se deben a estos que esperan retribución por el favor.
Conozco jueces justos y juezas justas. También conozco ineptos y corruptos. Los primeros deben su cargo a sus méritos: desempeño en el mercado laboral, logros profesionales, espíritu competitivo, honestidad, gigante sombra social y carácter para alcanzar metas. Los segundos deben su cargo a “padrinos” políticos; en consecuencia, se deben a estos que esperan retribución por el favor.
JUAN CRISTÓBAL MAC LEAN E.
Esperemos que todo el tole tole que se va armando con el tema de la inteligencia artificial no cunda como un incendio entre los conspiracionistas, que nunca faltan. Ya se los vio delirar durante la pandemia. Y vaya si el tema de la inteligencia artificial no será un campo fértil para inventar cualquier escenario digno de Marvel.
Esperemos que todo el tole tole que se va armando con el tema de la inteligencia artificial no cunda como un incendio entre los conspiracionistas, que nunca faltan. Ya se los vio delirar durante la pandemia. Y vaya si el tema de la inteligencia artificial no será un campo fértil para inventar cualquier escenario digno de Marvel.
HUMBERTO VACAFLOR GANAM
Muy rápido, el Gobierno boliviano reaccionó a la crítica de la revista The Economist acerca del manejo de la crisis: “Se quedó sin gas y sin ideas”.
La reacción del presidente Luis Arce está dirigida, seguramente, a mostrar a la revista británica que, si bien no hay gas en Bolivia, hay muchas ideas.
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