El Gobierno de Javier Milei resolvió ayer que el cine producido en Argentina para plataformas digitales sólo recibirá subsidios estatales si logra tener al menos 10 mil espectadores.
Mediante un decreto de la Presidencia argentina, publicado ayer en el Boletín Oficial, el Ejecutivo prohibió que el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) otorgue subsidios por adelantado y sin contraprestación a productores de películas no exhibidas en salas, sino a través de plataformas digitales de “streaming”.
A partir de ahora, en vez de ayudas anticipadas, el Incaa dará a los productores créditos y, si una vez estrenada, la película logra un mínimo de espectadores, obtendrán un subsidio estatal con el que podrán cancelar parte del préstamo.
En el caso de películas emitidas por “streaming”, deberán acreditar al menos 10 mil reproducciones en las plataformas para acceder a un subsidio. En lo que va de año se estrenaron 40 películas financiadas por el Incaa que tuvieron menos de 1.000 espectadores.
Los perjuicios ocasionados en estas más de tres semanas de bloqueos de carreteras y actos de violencia ejecutados por organizaciones afines al ala evista del Movimiento al Socialismo (MAS) no solo agravan la situación económica que atravesamos.
LUIS CHRISTIAN RIVAS SALAZAR
Hemos sido testigos de la segunda mayor quiebra bancaria en Estados Unidos, después de la ruina de Lehman Brother en 2008, el Silicon Valley Bank (SVB) se declaró en bancarrota, sumándose al hundimiento Signature y First Republic Bank que pasan a ser controlados por la Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés), perjudicando a inversores y empresas emergentes (startup) principalmente.
Hemos sido testigos de la segunda mayor quiebra bancaria en Estados Unidos, después de la ruina de Lehman Brother en 2008, el Silicon Valley Bank (SVB) se declaró en bancarrota, sumándose al hundimiento Signature y First Republic Bank que pasan a ser controlados por la Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés), perjudicando a inversores y empresas emergentes (startup) principalmente.
1.- Finalmente terminó el regateo, una historia que se repite todos los años. Por una parte, la posición maximalista de la COB, 10% hasta las últimas consecuencias, y por otra, la posición minimalista de área económica del Gobierno, 2%.
2.- Entra Salomón Arce, ni para uno ni para otro, 3% de incremento a la masa salarial y 5% al mínimo. Y ambas cabezas del mismo cuerpo saldrán a declarar victoria. El crédito político será abonado para el Presidente.
1.- Finalmente terminó el regateo, una historia que se repite todos los años. Por una parte, la posición maximalista de la COB, 10% hasta las últimas consecuencias, y por otra, la posición minimalista de área económica del Gobierno, 2%.
2.- Entra Salomón Arce, ni para uno ni para otro, 3% de incremento a la masa salarial y 5% al mínimo. Y ambas cabezas del mismo cuerpo saldrán a declarar victoria. El crédito político será abonado para el Presidente.
ALFONSO GUMUCIO DAGRON
Ha concluido una etapa de la epopeya de quienes quieren justicia en Bolivia. Se venció el plazo que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) fijó a los juristas independientes para reunir un millón y medio de firmas con el propósito de introducir cuatro reformas concretas y fundamentales en el sistema judicial, una de ellas en el proceso de elección de magistrados.
Ha concluido una etapa de la epopeya de quienes quieren justicia en Bolivia. Se venció el plazo que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) fijó a los juristas independientes para reunir un millón y medio de firmas con el propósito de introducir cuatro reformas concretas y fundamentales en el sistema judicial, una de ellas en el proceso de elección de magistrados.
RONNIE PIÉROLA GÓMEZ
Rosalía Eneldo aún recordaba con nostalgia el tiempo aquel en el que la gente no pensaba en bloquear los botaderos; para ella, y desde siempre, la sola idea de los bloqueos le resultaba repulsiva, no sólo porque se trataba de un acto egoísta y ruin, sino y principalmente porque sea el bloqueo que sea, el que sufría era el ciudadano de a pie.
Rosalía Eneldo aún recordaba con nostalgia el tiempo aquel en el que la gente no pensaba en bloquear los botaderos; para ella, y desde siempre, la sola idea de los bloqueos le resultaba repulsiva, no sólo porque se trataba de un acto egoísta y ruin, sino y principalmente porque sea el bloqueo que sea, el que sufría era el ciudadano de a pie.