El atleta orureño Héctor Garibay es prueba viviente de que los sueños, no sólo de una persona sino de un país, pueden lograrse con mucho esfuerzo, perseverancia y dedicación. Fueron horas, días, semanas y meses de entrenamiento sigiloso, pero disciplinado, que llevó al deportista, de la mano de su entrenadora Nemia Coca, a seguir destacando y creciendo.
Una muestra de ello es que el “Puma Andino”, como se lo conoce, obtuvo la victoria en la Media Maratón de Río de Janeiro, una prueba de 21 kilómetros que sirvió para su preparación de cara a los Juegos Olímpicos París 2024.
El fondista logró un tiempo de 1 hora, 3 minutos y 29 segundos llevando la tricolor a lo más alto del podio provocando que muchos bolivianos inflaran el pecho de orgullo.
Fue el mismo presidente del Estado, Luis Arce, quien le dedicó unas líneas de felicitación por su victoria. “Saludamos su gran participación en la Media Maratón de Río de Janeiro, Brasil, donde ganó la prueba de 21 kilómetros confirmando su gran nivel rumbo a los Juegos Olímpicos de París 2024. Todo el país celebra contigo, querido Héctor. ¡Felicidades!”, escribió en un post en su cuenta de Facebook.
Se trata de un nuevo triunfo internacional de Garibay que se suma a las victorias en la Maratón de Buenos Aires en 2021 y la de México en 2023; además de su clasificación a los Juegos Olímpicos de París, que se realizarán en julio próximo, gracias a su gran desempeño en la Maratón de Sevilla, España, en 2023.
Surgieron algunas críticas al atleta por participar en otras competencias y arriesgarse a una lesión; sin embargo, él respondió que estas actividades le permiten identificar sus fortalezas y debilidades, pero, además, esta última maratón le permitió conocer cómo rinde con una temperatura alta considerando que afrontará un calor similar en París.
“Siempre de cada competencia trato de aprender algo, ya que mi objetivo está centrado en los Juegos Olímpicos”, dijo ayer Garibay en el aeropuerto de El Alto ante una decena de periodistas.
Él reconoce que necesita trabajar más porque le quedan menos de cien días para superar sus “errores” y estar listo para ir a competir a Francia para “representar de mejor manera a los bolivianos”.
Pero no solo es esfuerzo y dedicación, según su entrenadora Coca -quien lo acompañó a Brasil-, sino que también es importante la psicología, la disciplina y el compromiso de Garibay. Agradeció a los auspiciadores del atleta, también el apoyo de la Gobernación de Oruro y del Ministerio de Salud porque esto permite que pueda tener las condiciones para entrenar.
El apoyo económico y moral suma para que el fondista pueda seguir adelante y lograr su sueño, convertirse en un ejemplo para muchos deportistas jóvenes destacando nuevamente y poner en alto nuevamente el nombre de Bolivia.