El río Rocha que en el pasado inspiró canciones y bañaba el valle de Cochabamba; ahora, parece agonizar frente a todos. Ya no queda nada de su corriente caudalosa y sin olor; es más, en la época seca parece un arroyo de aguas negras, fétidas y estancadas.
El río es parte de la cuenca del mismo nombre y su cauce principal atraviesa la región metropolitana de Cochabamba, la más poblada del departamento, lo que lo hace más vulnerable a las acciones humanas e industriales.
La situación del río Rocha ha empeorado en los últimos años, pero sigue siendo de gran importancia para el riego y el medioambiente y parques es el hábitat de varias especies de aves.
Cada día decenas de agricultores conectan sus bombas para succionar el agua que queda, pues el líquido aún así contaminado les sirve para regar sus cultivos de forraje.
Según una auditoría realizada en 1998, el río Rocha estaba poco contaminado al inicio, más al este de Sacaba, pero a medida que avanza a las zonas urbanas se tornaba más sucio. En tanto, que al finalizar estaba menos enfermo, porque todavía tenía la capacidad de recuperarse.
Sin embargo, la falta de acciones estructurales de parte de las alcaldías, la Gobernación, los habitantes y las industrias para evitar su contaminación ha empeorado su situación. Después de más de 20 años, en 2021, el río perdió su capacidad de recuperarse por sí solo por la presencia de materia orgánica e, incluso, metales.
En época seca, cuando el nivel del agua disminuye, el río es además un basural. En medio del agua negra se pueden ver plásticos, llantas y botellas. A pesar de la maraña de desechos, las aves, sobre todo, ibis, se meten a buscar alimento, aunque corren el riesgo de quedar atrapadas en medio de los desechos.
¿Qué pasó con las acciones que debían desarrollar las alcaldías del eje de conurbación y la Gobernación? Al menos se preveían hacer 11 plantas de tratamiento de aguas servidas para evitar que las aguas negras de Sacaba, Colcapirhua, Quillacollo, Vinto y Quillacollo se descarguen directamente al río sin un tratamiento adecuado.
El rechazo social a la construcción de las plantas hizo que la situación del río se deteriore aún más.
Un informe de la Contraloría General del Estado alertó sobre la contaminación y la falta de implementación de las plantas y control de residuos.
La crisis del río es un llamado de atención para que se retomen las recomendaciones de la Contraloría que estableció 103 tareas para la Gobernación, las alcaldías y los operadores del servicio de alcantarillado. Uno de los mecanismos también era el Plan Director del río Rocha.
¿Aún se puede salvar al río Rocha? Hay ejemplos en el mundo que demuestran que sí es posible revertir la contaminación, pero se requiere de un trabajo sostenido y de acciones reales para cortar las descargas de aguas residuales.
Los abusos sexuales perpetrados, en un establecimiento educativo cruceño, por cinco colegiales en contra de otros, menores que ellos, es el último de cuatro casos de violencia escolar que se hicieron de dominio público en Bolivia en los últimos meses. ¿Cuántos otros similares ocurren y ocurrieron y jamás se conocerán?
El jueves pasado, en Cochabamba, un microbús de la línea H causó un choque múltiple en la avenida República dejando el saldo trágico de cuatro personas muertas y una docena de heridos de gravedad. En los videos se pueden observar las escenas en las que los pasajeros salen disparados por las ventanillas de los vehículos, mientras estos terminan hechos trizas.
“Estamos totalmente bloqueados, ya no sabemos dónde más acudir, ninguna autoridad nos ayuda, estamos desesperados”, decía hace unos días un productor agropecuario de Capinota, víctima de los usurpadores de tierras, igual que decenas de otros habitantes de áreas con vocación agrícola y pecuaria.
La publicación, el domingo último, de una propuesta del expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada en la que plantea “un proyecto de Constitución Política del Estado” ha provocado las reacciones previsibles para una iniciativa de ese tipo, y más aún viniendo de quién viene.
La sucesión de casos y denuncias de corrupción que involucran a funcionarios del Estado es tan nutrida, desde hace unos meses, que parece ya muy difícil indignarse más y ha impulsado al Gobierno a presentar un anteproyecto de ley al respecto.
No es que en Bolivia sean raros los escándalos que manchan las gestiones gubernamentales y la actual ha debido enfrentarlos muy temprano: a las tres semanas de la posesión del gabinete de ministros.
Se acerca el fin de nuestras exportaciones de gas a Argentina, lo que significará una reducción importante de recursos para el Estado. No solo eso, sino que las proyecciones a mediano plazo perfilan a ese país como un serio competidor de Bolivia en la provisión del fluido a Brasil.
Hoy, como lo establece un decreto supremo, se celebra en Bolivia el Año Nuevo Andino Amazónico y del ChacoWillca Kuti 5531, “con suspensión de actividades públicas y privadas en todo el territorio nacional”.
Éste —junto con el del 22 de enero, día de la Fundación del Estado Plurinacional de Bolivia— es el segundo feriado del año que, después de poco más de una década de vigencia, aún no termina de completar su significado y plena asimilación para la gran mayoría.
El impacto del contrabando trasciende los perjuicios económicos para las empresas legales y el Estado, crece de manera descontrolada y se ha convertido en una actividad criminal organizada cuya magnitud exige una acción combinada y proporcional, no sólo en Bolivia, sino también en Chile y Perú.
Concluyó la feria internacional de Cochabamba en su primera versión Fexco y, por el momento, aunque todavía faltan las cifras oficiales, todo parece indicar que la cita empresarial fue un éxito.
Por más que las instancias estatales aseguren que se trata de “rumores” y “especulaciones”, la provisión de combustibles líquidos —diésel y gasolina— atraviesa dificultades crecientes que se traducen en la menor disponibilidad de esos productos, a pesar de las medidas gubernamentales impuestas al respecto hace poco más de un mes.