Hace casi dos meses, el Complejo Siderúrgico del Mutún entró en una fase decisiva de pruebas al vacío en cinco de sus plantas, un paso clave para el ajuste y arranque del proyecto siderúrgico más ambicioso del país. Estas pruebas incluyen las plantas de la Central Eléctrica, Concentración, Peletización, Acería y Laminación, y se desarrollan conforme al cronograma establecido, informó el presidente de la Empresa Siderúrgica del Mutún (ESM), Jorge Alvarado Rivas.
Las pruebas al vacío permiten evaluar el funcionamiento de equipos, como motores y generadores sin carga de materiales, asegurando su capacidad operativa antes de iniciar la producción. En la Central Eléctrica, por ejemplo, se probaron tres de los diez generadores previstos para abastecer de energía a todo el complejo. En las plantas de Laminación y Concentración, los ensayos incluyen la evaluación de laminadores, rodillos y otros equipos esenciales para el procesamiento de acero.
En la planta de Peletización, las pruebas se centran en el funcionamiento del horno rotatorio, discos peletizadores y el sistema de transporte de pellets, garantizando así una calibración precisa y óptima de cada componente.
El complejo está compuesto por siete plantas, de las cuales cinco ya se encuentran en la fase de pruebas al vacío. Se espera que todo el complejo esté en pleno funcionamiento en febrero de 2025, una vez que concluya la instalación de la planta de Reducción Directa de Hierro (DRI).