La Copa Simón Bolívar 2024 acabó el fin de semana para los elencos cochabambinos, tras la eliminación de Amanecer de Vinto y Municipal Tiquipaya en la fase de octavos de final. La esperanza de buscar una quinta plaza en la División Profesional 2025 quedó trunca, ya que por vez primera en cinco años no hay clubes de la región en las fases decisivas.
Amanecer se eliminó a manos de Petrolero de Yacuiba al caer 1-5 como local (1-10 en el global) y Municipal Tiquipaya empató 0-0 con CDT Real Oruro (global 1-2), en el estadio Sebastián Ramírez.
Desde 2019 hasta 2023, el valle sumó tres elencos a primera: Palmaflor (campeón 2019), Universitario de Vinto (campeón 2021) y San Antonio de Bulo Bulo (subcampeón y ganador del indirecto 2023). En 2020 y 2022, los clubes de Cochabamba llegaron a cuartos de final.
“Amanecer hizo una localía muy valiente, pero no se le dio el resultado. El primer tiempo podía irse 3-0 arriba, pero no se le dio. Tiquipaya no pudo, el equipo orureño (CDT Real Oruro) se cerró atrás (arco y defensa). El análisis (edición actual) es que no nos fue bien”, señaló el presidente de la Asociación de Fútbol Cochabamba (AFC), Pablo Zambrana.
En la edición 2024, Cochabamba inició con ocho representantes: Pasión Celeste, Municipal Tiquipaya, Cala Cala, Enrique Happ del Trópico, Municipal Colcapirhua, Nueva Cliza (División Primera “A”); Millonarios FC y Amanecer de Vinto (Liga Provincial).
Ahora, sin presencia valluna en la antepenúltima fase que inicia mañana, solo los departamentos de La Paz, Oruro, Tarija (Yacuiba), Chuquisaca, Beni y Santa Cruz (Warnes) tienen chances de sumar un equipo y hasta dos en 2025, el año del centenario de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF).
“Es una amargura, porque meses atrás se jugó la primer final profesional entre los equipos cochabambinos Universitario de Vinto y San Antonio de Bulo Bulo. Eso quisimos irradiar en la Simón Bolívar. Es amargo, pero de todo esto se aprende”, remarcó el titular de la AFC.
Aunque los bolivianos vivimos la evolución de una crisis política que agrava la situación económica y no parece tener perspectivas de un desenlace rápido, el mundo está pendiente de la jornada final de las elecciones en EEUU, cuyo resultado es tan incierto como trascendental.
Así lo muestra la prensa internacional, reflejando el final de varios meses de una campaña electoral atípica, marcada por la desinformación, la agresividad del expresidente candidato y la división del electorado.
Todos saben que las denominaciones de izquierda y derecha provienen de la Revolución Francesa en la que en la Asamblea Constitucional se ubicaron al lado derecho los girondinos que buscaban la mantención del absolutismo y al lado izquierdo los jacobinos que perseguían el cambio de ese sistema, tiempo desde el que quedaron dichos apelativos.
Todos saben que las denominaciones de izquierda y derecha provienen de la Revolución Francesa en la que en la Asamblea Constitucional se ubicaron al lado derecho los girondinos que buscaban la mantención del absolutismo y al lado izquierdo los jacobinos que perseguían el cambio de ese sistema, tiempo desde el que quedaron dichos apelativos.
El 29/08/1985 Víctor Paz Estenssoro promulgó el DS 21060 apoyado en el “Pacto por la democracia” suscrito por el MNR y la ADN. Resumió sus motivos afirmando que “Bolivia se nos muere”. A esas alturas el capitalismo de estado consolidado en 1952 había colapsado y la economía agonizaba en el contexto de la hiperinflación.
El 29/08/1985 Víctor Paz Estenssoro promulgó el DS 21060 apoyado en el “Pacto por la democracia” suscrito por el MNR y la ADN. Resumió sus motivos afirmando que “Bolivia se nos muere”. A esas alturas el capitalismo de estado consolidado en 1952 había colapsado y la economía agonizaba en el contexto de la hiperinflación.
Una noche antes de que Eduardo muriera, lo soñé en una silla de ruedas, muy delgado y con un gorro que no sé si alguna vez usó. Me acercaba y le ponía mi mano en su frente y le decía que iba a mejorar. Él respondía que ya no... Dado que no he logrado interpretar ese sueño de otra forma que no fuera una despedida, ocupo mi columna -como lo han hecho otros con el mismo afecto- para decirle a-Dios.
Una noche antes de que Eduardo muriera, lo soñé en una silla de ruedas, muy delgado y con un gorro que no sé si alguna vez usó. Me acercaba y le ponía mi mano en su frente y le decía que iba a mejorar. Él respondía que ya no... Dado que no he logrado interpretar ese sueño de otra forma que no fuera una despedida, ocupo mi columna -como lo han hecho otros con el mismo afecto- para decirle a-Dios.
Eduardo Pérez Iribarne (EPI) fue un sacerdote boliviano. Imbuido de la inculturación jesuítica, buscó parecerse —además de entender— a la sociedad en la que eligió vivir y morir. Por ejemplo, él se forzó a abandonar el acento español. En uno de sus colmos, a veces usaba una “erre” artificial, pero por lo demás adoptó el habla paceña de clase media. A la vez, le gustaba ejercitarse en frases de la gente, como la de “habló ‘para mí’”.
Eduardo Pérez Iribarne (EPI) fue un sacerdote boliviano. Imbuido de la inculturación jesuítica, buscó parecerse —además de entender— a la sociedad en la que eligió vivir y morir. Por ejemplo, él se forzó a abandonar el acento español. En uno de sus colmos, a veces usaba una “erre” artificial, pero por lo demás adoptó el habla paceña de clase media. A la vez, le gustaba ejercitarse en frases de la gente, como la de “habló ‘para mí’”.