En el marco del Día de la Mujer Boliviana, que se recordó el 11 de octubre, en honor al nacimiento de la escritora cochabambina, Adela Zamudio, tres destacadas empresarias comparten con la Revista OH! sus historias de éxito, desafíos y su visión sobre el papel del empoderamiento femenino en el actual crecimiento económico y social del país.
“DECIDÍ EMPRENDER”
La historia de Denisse Dalence de Tarradelles comenzó en 2009. Luego de terminar sus estudios en Ingeniería Comercial pensó en seguir “el camino tradicional de encontrar un empleo en una oficina”, pero su realidad era distinta. “Ya tenía a mis hijos y me di cuenta de que necesitaba un trabajo que no solo me permitiera apoyar a mi esposo económicamente, sino que también me diera la flexibilidad para estar presente en sus vidas. Ahí fue cuando decidí emprender”, cuenta. Entonces, con tan solo 200 bolivianos, decidió montar un pequeño puesto de ceviches en Cochabamba.
Con esfuerzo y perseverancia, su negocio creció y se convirtió en un referente en la gastronomía local. Estudió gastronomía y actualmente es la presidenta de la Cámara Gastronómica de Cochabamba (ASERAC), desde donde busca transformar la industria “no solo en términos de negocios, sino también como un espacio donde las mujeres podamos liderar y hacer crecer nuestras comunidades”.
Para ella, ser empresaria en Bolivia es “un acto de empoderamiento y resistencia”, en un entorno donde las brechas salariales y la falta de representación en roles directivos aún persisten. “Creo que mi trabajo inspira a otras mujeres porque es un ejemplo de que el éxito se construye con esfuerzo, dedicación y el apoyo de quienes te rodean”, añade.
Consejo para las mujeres que desean emprender: “No tengan miedo de empezar, aunque las circunstancias parezcan difíciles. La educación y la capacitación son claves para tener éxito, y hoy en día existen muchas instituciones que apoyan a las mujeres emprendedoras. Rodéate de personas que te apoyen y confía en tu visión”.
“CON UN GRAN EQUIPO”
“Iniciamos nuestra historia como clientes en busca de una buena taza de café en 1996, con tres mesas y una pequeña barrita en la zona de San Miguel donde nace Alexander Coffee”, recuerda Pamy Quezada. Hoy, su empresa familiar, de la que es socia y gerente general, cuenta con 15 sucursales y casi 300 empleados, consolidándose como una de las marcas más conocidas en Bolivia. “Me siento muy feliz porque al ser empresaria tengo la oportunidad de generar muchos empleos que creo que es lo que necesita nuestro país. Sin embargo, se debe tomar en cuenta que no se puede salir adelante sola, sin la ayuda de un gran equipo, como es el que tenemos en Alexander Coffee”, señala.
A través de charlas y mentorías, Quezada ayuda a sus colaboradores a crecer tanto profesional como personalmente. “Considero que todas las personas emprendedoras comienzan con un sueño, y soñar no cuesta nada, así que mejor si sueñas en grande”, subraya.
Consejo para las mujeres que desean emprender: “ Siento que la mujer puede desempeñarse en distintos roles de la sociedad sin dejar de ser femenina, y en la actualidad existen varias empresas exitosas lideradas por mujeres bolivianas. Tomen la decisión de emprender eligiendo lo que realmente les gusta hacer. El éxito, para mí, es ser feliz con lo que haces.”
“INTENTO MOTIVAR A MUJERES”
Con tan solo 24 años, egresada de la carrera de Economía, Teresa Cadima, exmodelo, coach en nutrición holística y campeona sudamericana de la NABBA-WFF en fitness (2017), fundó La Escarola, un servicio de catering saludable que se posicionó en Cochabamba. Su empresa logró conectar con una clientela mayoritariamente femenina. A pesar de los desafíos iniciales, como la falta de financiación y los estereotipos de género, demostró que el éxito empresarial es posible con determinación y pasión.
“Haber ganado a pulso (con trabajo, dedicación y constancia) el título de ‘Mujer empresaria’ me llena de orgullo, el cual, claro, viene cargado de múltiples responsabilidades. Sin embargo, creo que la multifuncionalidad es una habilidad femenina y me alegra ver, que a diario somos más las mujeres que luchamos por cambiar el panorama tradicional, llenando espacios que por bastante tiempo han tenido poca presencia femenina, trayendo consigo los beneficios que la igualdad provoca en la sociedad”, expresa.
Consejo para las mujeres que desean emprender: “Ama e inyecta amor a tu empresa. Iniciar desde la pasión te ayudará a mantenerte motivada y enfocada a largo plazo. ”.
Al igual que Denisse, Pamy y Teresa, muchas mujeres emprendedoras van construyendo su propio camino, atreviéndose a soñar en grande, construyendo negocios que no solo generan empleo, sino también una nueva visión de inclusión y equidad.