Frente a la devastadora crisis de incendios forestales que afecta a Bolivia, diversas organizaciones medioambientales han emitido un pronunciamiento urgente, alertando sobre la gravedad de la situación.
Tunari Sin Fuego, Alas Chiquitanas, Colectivo No a la Tala de Árboles en Cochabamba, y otras agrupaciones advierten que el fuego ha destruido más de 2 millones de hectáreas en Santa Cruz, afectando a la flora, fauna y a especies en peligro de extinción, como la paraba azul.
En el comunicado, las organizaciones señalan que los recursos locales, incluidos bomberos, guardaparques y comunidades, están desbordados, y que es esencial que el Gobierno de Bolivia tome medidas inmediatas para frenar esta crisis. En este sentido, las agrupaciones han presentado cinco exigencias clave para combatir los incendios:
1. Solicitar ayuda internacional: Exigen que el gobierno gestione de inmediato apoyo internacional, tanto en recursos humanos como en equipamiento especializado, para controlar los incendios que superan las capacidades locales.
2. Implementar políticas de prevención y restauración ambiental: Proponen medidas efectivas para frenar la expansión del fuego y restaurar las áreas ya afectadas, asegurando la protección a largo plazo de los ecosistemas dañados.
3. Sancionar a los responsables: Solicitan la aplicación estricta de sanciones a quienes provoquen incendios, con un monitoreo constante que garantice el cumplimiento de las leyes vigentes.
4. Derogar leyes que favorecen los incendios: Exigen la eliminación de varias leyes y decretos que, según las organizaciones, permiten prácticas que contribuyen a la propagación de los incendios. Las normativas mencionadas incluyen las leyes 337, 502, 739, 740, 741, 952, 1098, 1171 y el Decreto Supremo 3874.
5. Llamado urgente a autoridades y sociedad civil: Insisten en la necesidad de unir fuerzas entre el gobierno y la sociedad para proteger el patrimonio natural, subrayando que el futuro de los bosques y las próximas generaciones está en juego.
Las organizaciones advierten que la destrucción no puede continuar y que es fundamental que se tomen acciones inmediatas para detener el avance del fuego, proteger la biodiversidad y asegurar un futuro sostenible para Bolivia.