El secretario de Salud de la Gobernación de Cochabamba, Nelson Ticona, dijo ayer que buscan alternativas para cubrir el déficit de ítems para el personal de salud en el departamento.
Señaló que los ítems del personal médico son designados por el Ministerio de Salud desde el año 2007 y no se considera el crecimiento vegetativo. A esto se suma que los ítems que eran designados a partir de los recursos por el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) también se verán afectados.
Ticona explicó que al no poder cubrir el déficit de personal de salud en los distintos niveles, desde el Ministerio de Salud han solicitado a las alcaldías y gobernaciones que “busquen alternativas”.
“Probablemente la estrategia que se podría utilizar es que los gobiernos municipales y las gobernaciones puedan buscar una alternativa de contratar consultores en líneas y poder cubrir el déficit”, sostuvo.
La intención es garantizar los recursos para contratar personal de salud, incluso como consultores en línea. Ticona adelantó que desde la Gobernación analizan alternativas para contar con personal en los hospitales de tercer nivel.
Las informaciones que se difunden al público acerca de lo que ocurre en los recintos penitenciarios del país están generalmente marcadas por las condiciones de hacinamiento que soportan los privados de libertad, los episodios de violencia y otros aspectos de la vida detrás de las rejas.
En el artículo anterior del 21/10/2024 nos referimos a las ideas de Carl Schmitt, quien sostenía que la Constitución no es jurídica sino política, por lo que su interpretación y su acción cautelar no pueden estar en manos de magistrados o jueces debiendo ser más bien responsabilidad de quienes gocen del mayor prestigio social y honestidad política, solo así -señalaba- se podría confiar en un “guardián de la Constitución”.
En el artículo anterior del 21/10/2024 nos referimos a las ideas de Carl Schmitt, quien sostenía que la Constitución no es jurídica sino política, por lo que su interpretación y su acción cautelar no pueden estar en manos de magistrados o jueces debiendo ser más bien responsabilidad de quienes gocen del mayor prestigio social y honestidad política, solo así -señalaba- se podría confiar en un “guardián de la Constitución”.
GABRIELA CANEDO VÁSQUEZ
Los balineses en Indonesia practican la riña de gallos, un “juego” por el cual se desviven y hasta desafían a la autoridad llevándolo a cabo, pese a su prohibición. Para que se dé el combate entre los gallos, los criadores los enfrentan, los azuzan, hacen que se picoteen la espalda. Los animales se agitan, abren sus cuellos y su visión se enfoca en su oponente. En ese momento es cuando el público grita con sus apuestas ya sea por uno u otro gallo.
Los balineses en Indonesia practican la riña de gallos, un “juego” por el cual se desviven y hasta desafían a la autoridad llevándolo a cabo, pese a su prohibición. Para que se dé el combate entre los gallos, los criadores los enfrentan, los azuzan, hacen que se picoteen la espalda. Los animales se agitan, abren sus cuellos y su visión se enfoca en su oponente. En ese momento es cuando el público grita con sus apuestas ya sea por uno u otro gallo.
IGNACIO VERA DE RADA
Entre las cosas más improbables del mundo, ocupa uno de los primeros lugares la posibilidad de que las mujeres del entorno próximo de Evo Morales (exministras, exparlamentarias, (ex)amigas, (ex)parejas, etcétera) lean este modesto artículo de opinión. Primero, porque siempre fui considerado por los izquierdistas como un conservador y, por consecuencia, como una especie obsoleta para los tiempos que corren.
Entre las cosas más improbables del mundo, ocupa uno de los primeros lugares la posibilidad de que las mujeres del entorno próximo de Evo Morales (exministras, exparlamentarias, (ex)amigas, (ex)parejas, etcétera) lean este modesto artículo de opinión. Primero, porque siempre fui considerado por los izquierdistas como un conservador y, por consecuencia, como una especie obsoleta para los tiempos que corren.
Como había subrayado en una columna publicada a principios de año, la disputa por la candidatura y el control de la sigla del Movimiento Al Socialismo (MAS) se trasladaría a las calles, en la medida en que no existan otras opciones o salidas. Las calles, entonces, se constituirían en la última posibilidad de imponer la candidatura de Morales con marchas y bloqueos.
Como había subrayado en una columna publicada a principios de año, la disputa por la candidatura y el control de la sigla del Movimiento Al Socialismo (MAS) se trasladaría a las calles, en la medida en que no existan otras opciones o salidas. Las calles, entonces, se constituirían en la última posibilidad de imponer la candidatura de Morales con marchas y bloqueos.