La noche del pasado 10 de noviembre, víctima de un infarto cardíaco masivo, murió el abogado Gonzalo Párraga Gallardo. La noticia se hizo pública desde las primeras horas de la mañana del día siguiente, causando congoja en quienes lo conocimos.
Nació el 1 de febrero de 1953 en Sucre, hizo sus estudios en el colegio Sagrado Corazón de esa ciudad y luego en el San Calixto de La Paz, donde salió bachiller en 1970, integrando la promoción “Juan Poma”, denominada así en homenaje a uno de los estudiantes de ese colegio que fue asesinado por una de las dictaduras de la época. Entre 1970-1972, formó parte de la Escuela de Cine de Luis Espinal, titulándose posteriormente en Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad Mayor de San Andrés. Realizó estudios de posgrado en Derechos Humanos en la Universidad Carlos III de España, en Resolución de Conflictos Políticos en la Universidad Javeriana de Colombia y en Estudios Penales de la Universidad en la Habana, Cuba.
El currículum de Gonzalo da cuenta de su inclinación a la defensa de los derechos humanos y a la resolución pacífica de conflictos políticos, tareas que cumplió a lo largo de su vida, como presidente de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de El Alto, como funcionario del Ministerio de Justicia en la gestión del Dr. René Blattman, en la Defensoría del Pueblo y, finalmente, en la Fundación UNIR Bolivia. Su incursión en el derecho penal también tuvo que ver con la vigencia y defensa de los derechos humanos, en la medida en que esta rama del derecho suele utilizarse de manera perversa, por los gobiernos en primer lugar, para cercenar los derechos de las personas y obligarlas a conductas no deseadas, como sucedió, entre otros, con Marco Antonio Aramayo, exdirector ejecutivo del Fondioc.
Fue una persona sencilla y amigable y algo que marcó su paso por todas las instituciones en que trabajó fue su entrega, renuncia y valentía para enfrentar las tareas que se le asignaban, amén de las iniciativas que en muchas oportunidades nacieron de su experiencia y conocimiento.
Así lo conocí cuando me tocó trabajar en la Defensoría del Pueblo, en épocas en que esta noble institución estuvo encabezada por Ana María Romero de Campero. Gonzalo llevó adelante tareas muchas veces dificilísimas, en las cuales puso en riesgo su integridad personal y su propia vida; esta columna no alcanzaría para detallar las ocasiones en que estuvo en esa situación, pero siempre lo hizo con alegría y compromiso, sin retacear su concurso.
Cuando el Gobierno del MNR instruyó a sus parlamentarios designar como titular de la Defensoría del Pueblo a una persona sometida a sus decisiones, pese a que la población pedía la ratificación de Ana María Romero en el cargo, él sintió en carne propia lo desacertado de esa decisión. Ya se estaban desatando los conflictos que terminarían con la renuncia del presidente Sánchez de Lozada y Gonzalo Párraga fue, una vez más, a cumplir sus tareas en la ciudad de El Alto. Allí, los pobladores entendieron que la Defensoría ya no defendería al pueblo, sino al Gobierno, y por esa razón no aceptaron la presencia de sus personeros.
Con el paso de los años es posible afirmar que los acontecimientos que terminaron el 17 de octubre de 2003 con la renuncia del presidente tuvieron como de sus principales ingredientes la errónea decisión de nombrar un Defensor que en realidad no defendería al pueblo, aunque en aquella época no era posible aún vislumbrar el desprestigio y la manera en que esta institución sería manchada por los gobiernos del MAS. Se mantuvo en la Defensoría también durante la gestión de Waldo Albarracín.
Otra de las características de Gonzalo, en el desarrollo de sus actividades fue su apuesta permanente por el diálogo y no por la confrontación. También fueron innumerables las ocasiones en que dio muestras de templanza y serenidad para contribuir a la solución de conflictos de todo tipo. Eso lo llevó, al dejar de trabajar en la Defensoría, a prestar sus servicios y poner a disposición de la población su experiencia y conocimientos en la Fundación UNIR Bolivia, en la cual trabajó varios años.
Por lo general se recuerda a las instituciones por sus titulares, pero pocos reparan en el hecho de que el éxito de ellos se debe al esfuerzo de muchas personas anónimas. Ese fue el caso de Gonzalo, que contribuyó desinteresadamente al éxito de todas las instituciones por las que pasó. No fue un impostor de los derechos humanos, que los utilizó para beneficio personal para luego vulnerarlos o alcahuetear en su vulneración desde posiciones de poder.
Sus cinco hijos, sus siete nietos, sus hermanos y hermana, sus amigos tenemos un ejemplo a seguir. Gracias por todo, Gonzalo. Descansa en paz y, como me hizo notar mi amigo Alfonso Vía Reque a propósito de la muerte de Gustavo Gutiérrez, cuando uno muere no sólo descansa, sino que goza de la presencia de Dios, al mejor estilo de lo propuesto por Santo Tomás de Aquino.
¡Hasta siempre, Gonzalo!
El 4 de junio de 2012, Zarlet Rowina Clavijo Martínez, de 17 años, salió de su trabajo ubicado en el edificio San Pablo, en la avenida 16 de julio de La Paz, para encontrarse con su madre, Marcela Martínez, en la zona de Obrajes. Nunca llegó.
El 4 de junio de 2012, Zarlet Rowina Clavijo Martínez, de 17 años, salió de su trabajo ubicado en el edificio San Pablo, en la avenida 16 de julio de La Paz, para encontrarse con su madre, Marcela Martínez, en la zona de Obrajes. Nunca llegó.
EDWIN CACHO HERRERA SALINAS
Cinco meses de incendios forestales este año. Más de diez millones de hectáreas consumidas por el fuego descontrolado y posiblemente muchos millones más de animales, de diferentes especies, muertos por la devastación. El número de personas que en el futuro presentarán enfermedades por las humaredas que envolvieron por semanas e incluso meses a municipios rurales de Santa Cruz y Beni, y varias capitales, es incalculable en este momento.
Cinco meses de incendios forestales este año. Más de diez millones de hectáreas consumidas por el fuego descontrolado y posiblemente muchos millones más de animales, de diferentes especies, muertos por la devastación. El número de personas que en el futuro presentarán enfermedades por las humaredas que envolvieron por semanas e incluso meses a municipios rurales de Santa Cruz y Beni, y varias capitales, es incalculable en este momento.
EMILIO MARTÍNEZ CARDONA
Bajo la apariencia de algo deseable, el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) podría estar regalándole a Bolivia un caramelo envenenado. Es decir, que en el envoltorio de la exclusión definitiva del reeleccionismo de Evo Morales, los que en rigor son exmagistrados del TCP han asumido funciones propias del Tribunal Supremo Electoral (TSE), incluso emitiendo criterios sobre quiénes pueden o no postular con base en otras gestiones distintas a la presidencial.
Bajo la apariencia de algo deseable, el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) podría estar regalándole a Bolivia un caramelo envenenado. Es decir, que en el envoltorio de la exclusión definitiva del reeleccionismo de Evo Morales, los que en rigor son exmagistrados del TCP han asumido funciones propias del Tribunal Supremo Electoral (TSE), incluso emitiendo criterios sobre quiénes pueden o no postular con base en otras gestiones distintas a la presidencial.
GABRIELA CANEDO VÁSQUEZ
Hace un mes impartí un módulo en la Maestría en Investigación Cualitativa, de la Universidad Mayor de San Simón. Tuve la oportunidad y fortuna de revisar los avances de investigación de 15 maestrantes quienes, a modo de artesanos, las esculpen. Sacar adelante una tesis de maestría, es una hazaña la mayor parte de las veces, si es que el estudiante además de trabajar debe ejercer otros oficios.
Hace un mes impartí un módulo en la Maestría en Investigación Cualitativa, de la Universidad Mayor de San Simón. Tuve la oportunidad y fortuna de revisar los avances de investigación de 15 maestrantes quienes, a modo de artesanos, las esculpen. Sacar adelante una tesis de maestría, es una hazaña la mayor parte de las veces, si es que el estudiante además de trabajar debe ejercer otros oficios.
En 1985, una devastadora crisis económica puso fin a la etapa de estatismo desarrollista inspirada en el Plan Bohan y la Cepal, e inició la etapa del libre mercado, un modelo que disminuyó el control del Estado sobre la economía e impuso una serie de reformas dirigidas a dinamizar la participación del sector privado, fortalecer la diversificación y, sobre todo, exportar.
En 1985, una devastadora crisis económica puso fin a la etapa de estatismo desarrollista inspirada en el Plan Bohan y la Cepal, e inició la etapa del libre mercado, un modelo que disminuyó el control del Estado sobre la economía e impuso una serie de reformas dirigidas a dinamizar la participación del sector privado, fortalecer la diversificación y, sobre todo, exportar.
CARLOS DERPIC SALAZAR
La noche del pasado 10 de noviembre, víctima de un infarto cardíaco masivo, murió el abogado Gonzalo Párraga Gallardo. La noticia se hizo pública desde las primeras horas de la mañana del día siguiente, causando congoja en quienes lo conocimos.
La noche del pasado 10 de noviembre, víctima de un infarto cardíaco masivo, murió el abogado Gonzalo Párraga Gallardo. La noticia se hizo pública desde las primeras horas de la mañana del día siguiente, causando congoja en quienes lo conocimos.
JUAN CRISTÓBAL MAC LEAN E.
El caso de la elección de Trump es una fuente inagotable de enseñanzas para comprender, también, el fenómeno ya ampliamente reconocido como patético de Evo Morales a quien, nunca lo olvidemos, podemos llamar también el Fraudulento.
El caso de la elección de Trump es una fuente inagotable de enseñanzas para comprender, también, el fenómeno ya ampliamente reconocido como patético de Evo Morales a quien, nunca lo olvidemos, podemos llamar también el Fraudulento.
El que impuso el apodo de “El Jefazo” fue el periodista argentino Martín Sivak, quien con ese título —El Jefazo— publicó en 2008 la que se supone es la biografía más completa del expresidente, Evo Morales.
El que impuso el apodo de “El Jefazo” fue el periodista argentino Martín Sivak, quien con ese título —El Jefazo— publicó en 2008 la que se supone es la biografía más completa del expresidente, Evo Morales.
“¿De qué color es el mundo? / con asombro preguntó, / justo del color que quiera pintarle tu corazón”, canta la señora Matilde Casazola para ayudarnos a construir el futuro.
“¿De qué color es el mundo? / con asombro preguntó, / justo del color que quiera pintarle tu corazón”, canta la señora Matilde Casazola para ayudarnos a construir el futuro.
Un Legislativo que espanta a los ciudadanos por la violencia recurrente que enfrenta a los representantes nacionales que han abandonado el debate parlamentario; una justicia deslegitimada por la cuestionada prórroga de los altos tribunales de la nación, la manipulación política y la falta de independencia de sus administradores; un Ejecutivo sin gobernabilidad que no puede dar respuestas y soluciones a la crisis económica y social que aqueja a la ciudadanía; un Tribunal Electoral que no puede avanzar co
Un Legislativo que espanta a los ciudadanos por la violencia recurrente que enfrenta a los representantes nacionales que han abandonado el debate parlamentario; una justicia deslegitimada por la cuestionada prórroga de los altos tribunales de la nación, la manipulación política y la falta de independencia de sus administradores; un Ejecutivo sin gobernabilidad que no puede dar respuestas y soluciones a la crisis económica y social que aqueja a la ciudadanía; un Tribunal Electoral que no puede avanzar co